lunes, 25 de febrero de 2008

Perú: Alan García y la represión

- Català

Perú no passa per un dels seus millor moments, si es que algun cop n'ha tingut de bons. Les polítiques neoliberals impulsades pel president Alan García generen, cada dia més, més oposició ciutadana. Aquestes polítiques, continuistes dels governs anteriors, afavoreixen a les grans mutinacionals estrangeres quan la majoria de la població viu en la pobresa. En les últimes eleccions, Ollanta Humala, clar defensor d'una assemblea constituent i contrari a la submissió a les empreses estrangeres i a Washington (proper al moviment polític impulsat per Veneçuela, Bolívia i Equador), va perdre les eleccions per un estret marge. Les mobilitzacions ciutadanes són cada cop més freqüents i actualment, a Perú existeix estat d'excepció en 8 de les seves províncies.

La setmana passada hi va haver una serie de bloquejos de rutes per part dels agricultors durant un aturament nacional agrari. Aquests van ser reprimits per la policia i les forces armades i 4 persones van morir per impacte de bala. El president del país, va declarar que "Yo creo que el derecho a la seguridad es la primera obligación del Estado, y esta es la respuesta del Gobierno, de las leyes y de la Constitución", "Tenemos absoluta información que mucha gente que todavía responde a manos terroristas con intervención extranjera está detrás de todo esto"*.
Les pròpies paraules del president reflexa, per un lloc, la falta d'humanisme i sensibilitat envers els morts, i per un altre, la possible demagògia sobre els fets. Segons ell, sembla legítim que per mantenir la seguretat (no sé de quina deu parlar, però els més insegurs són els pobres que no es veuen beneficiats de les seves polítiques) s'ha de fer el que sigui. Els morts, podem constatar doncs, són una conseqüència inevitable per mantenir la "seguretat". Respecte a la segona cita, aquells que estan tenint una influència estrangera, una ajuda dels Estats Units principalment, són els que van perdre el poder polític per primer cop a Veneçuela i Bolívia: la oligarquia fins aleshores dominant. La veritat és que no es pot saber a què es refereix el president amb
"Tenemos absoluta información que mucha gente que todavía responde a manos terroristas con intervención extranjera está detrás de todo esto". La intervenció terrorista estrangera ha sigut en els últims temps sempre perpetrada per Estats Units, i l'executiu peruà, amb la seva alineació amb aquest país que practica el terrorisme d'estat, és poc probable que sigui el blanc d'una intervenció estrangera. Qui sí vol intervenir en les decisions del país és la gran majoria pobre, on avui, intenta influir en les decisions d'un govern (que treballa molt més pel capital estranger) a través de mobilitzacions.
Esperem que un dia pugui demostrar-se amb informació contrastada les paraules de Alan García. Si més no, el que es pot interpretar avui és que menteix i fa demagògia.


* Altres declaracions:
"La Policía ha actuado con gran convicción y decisión y yo felicito a la Policía. Está muy bien que defienda al Perú, y ahora queremos ver cómo se traduce esto en el enjuiciamiento de los culpables", "Que sirva de lección para que cuando alguien promueva públicamente y agitadamente un paro, sepa a dónde está conduciendo a estas personas, que sepa a qué está abriendo las puertas", "De ahora en adelante, todo aquel que convoque a este tipo de movilizaciones tiene que ser directamente responsable de cualquier cosa que ocurra, de la destrucción y de la muerte de cualquier persona".


- Castellano

Perú no pasa por uno de sus mejores momentos, si es que alguna vez ha pasado por buenos. Las políticas neoliberales impulsadas por el presidente Alan García generan, cada día más, más oposición ciudadana. Estas políticas, continuistas de los gobiernos anteriores, favorecen a las grandes mutinacionales extranjeras cuando la mayoría de la población vive en la pobreza. En las últimas elecciones, Ollanta Humala, claro defensor de una asamblea constituyente y contrario a la sumisión a les empresas extranjeras y a Washington (cercano al movimiento político impulsado por Venezuela, Bolivia y Ecuador), perdió las elecciones por un estrecho margen. Las movilizaciones ciudadanas son cada vez más frecuentes y actualmente, en Perú existe estado de excepción en 8 de sus provincias.

La semana pasada hubo una serie de bloqueos de rutas por parte de los agricultores durante un paro nacional agrario. Estos fueron reprimidos por la policía y las fuerzas armadas y 4 personas murieron por impacto de bala. El presidente del país, declaró que "Yo creo que el derecho a la seguridad es la primera obligación del Estado, y esta es la respuesta del Gobierno, de las leyes y de la Constitución", "Tenemos absoluta información que mucha gente que todavía responde a manos terroristas con intervención extranjera está detrás de todo esto"*.
Las propias palabras del presidente reflejan, por un lado, la falta de humanismo y sensibilidad con los muertos, y por otro, la posible demagogia sobre los hechos. Según él, parece legítimo que para mantener la seguridad (no sé de cual debe hablar, pero los más inseguros son los pobres que no se ven beneficiados de sus políticas) se tiene que hacer lo que sea. Los muertos, podemos constatar entonces, son una consecuencia inevitable para mantener la "seguridad". Respecto a la segunda cita, aquellos que están teniendo una influencia extranjera, una ayuda de los Estados Unidos principalmente, son los que perdieron el poder político por primera vez en Venezuela y Bolivia: la oligarquía hasta entonces dominante. Y la verdad es que no es puede saber a que se refiere el presidente con
"Tenemos absoluta información que mucha gente que todavía responde a manos terroristas con intervención extranjera está detrás de todo esto". La intervención terrorista extranjera en los últimos tiempos ha sido siempre perpetrada por Estados Unidos, y el ejecutivo peruano, con su alineación con ese país que practica el terrorismo de estado, es poco probable que sea el blanco de una intervención extranjera. Quien sí quiere intervenir en las decisiones del país es la gran mayoría pobre, donde hoy, intenta influir en les decisiones de un gobierno (que trabaja mucho más para el capital extranjero) a través de movilizaciones.
Esperemos que un día pueda demostrarse con información contrastada las palabras de Alan García. Si más no, lo que hoy se pude interpretar es que miente y hace demagogia.


* Otras declaraciones: "La Policía ha actuado con gran convicción y decisión y yo felicito a la Policía. Está muy bien que defienda al Perú, y ahora queremos ver cómo se traduce esto en el enjuiciamiento de los culpables", "Que sirva de lección para que cuando alguien promueva públicamente y agitadamente un paro, sepa a dónde está conduciendo a estas personas, que sepa a qué está abriendo las puertas", "De ahora en adelante, todo aquel que convoque a este tipo de movilizaciones tiene que ser directamente responsable de cualquier cosa que ocurra, de la destrucción y de la muerte de cualquier persona".

1 comentario:

asimov dijo...

Perdona; la traducción al castellano??

salu2.